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La ciudad de Vienne, situada a orillas del Ródano en el departamento de Isère, es una apuesta segura para los amantes de la historia. Antigua ciudad galo-romana, próspera y avanzada, está repleta de tesoros históricos que se remontan a la Antigüedad, cuando Vienna era una de las ciudades más importantes de la Galia. Entre los vestigios más emblemáticos de esta época destacan un teatro romano y un templo, ambos impresionantes y muy bien preservados, son unos de los pocos ejemplares existentes en Francia. A los muchos vestigios galo-romanos se suman también edificios pertenecientes a la Edad Media, una época en la que Vienne era la verdadera cuna del cristianismo, y una ciudad religiosa que ha sabido desarrollar su patrimonio arquitectónico. Hoy en día, con una población de 30.000 habitantes, ofrece la oportunidad de descubrir sus importantes restos antiguos y medievales. Además la ciudad se anima con su famoso festival de música “Jazz à Vienne”, que reúne todos los años a grandes artistas en el antiguo teatro. Una ciudad que no puedes perderte, impregnada de historia, cultura y gastronomía, ¡a tan sólo 30 minutos de Lyon!
Has llegado a la plaza de la Picota, que debe su nombre a que durante mucho tiempo fue el lugar donde se ataba a los condenados a la picota, el pilar que se utilizaba para exponer a los condenados a la vista de todos, antes de ser ahorcados en la plaza. Leer más
Sé que es una cuesta dura y larga, pero una vez alcances la cima te verás recompensado con una preciosa vista de la ciudad y sus alrededores. Mientras tanto, repasemos la historia de lo que hoy se conoce como la Ciudad Santa. Leer más
Después del esfuerzo, tendrás la recompensa. Es una cuesta empinada, es cierto, pero las vistas desde la colina de Pipet son excepcionales. Abajo se puede ver el antiguo teatro, en todo su esplendor y notable estado de preservación, así como los tejados de la ciudad, Leer más
Te encuentras en la cima de la colina de Pipet, desde donde se puede contemplar la ciudad de Vienne. La capilla de Nuestra Señora de Pipet es un santuario de la Virgen María, construido en 1873, que alberga una estatua de la Virgen en piedra volcánica, esculpida en 1858. Leer más
Mientras descendemos hacia el centro de la ciudad, por el Chemin des Amoureux, podemos hablar del acontecimiento que anima la ciudad todos los años durante 2 semanas llamado Jazz en Vienne. Este festival, cuyos conciertos tienen lugar en el impresionante teatro romano, Leer más
Te encuentras ante uno de los mayores vestigios de Vienne, e incluso de Francia, si nos atenemos a la notable conservación de este lugar histórico. Es aquí que en 1908, este antiguo teatro construido en el siglo I d.C., fue descubierto. Leer más
Este teatro, conocido como teatro François Ponsard, se encuentra en el lugar del antiguo ayuntamiento de Vienne, que fue demolido en el siglo XVIII por estar demasiado deteriorado. Fue el arqueólogo Pierre Schneyder quien, a sus expensas, hizo construir aquí un teatro, Leer más
Te hallas en el jardín arqueológico de Cibeles, cuyos impresionantes restos visibles están catalogados en su mayoría como monumentos históricos. Situado en pleno centro de Vienne, alberga las ruinas de los antiguos edificios que componían el foro romano en el siglo I d.C. Leer más
Vienne es una ciudad cargada de historia, y para descubrirla y comprenderla, nada mejor que una visita al Museo de Bellas Artes y Arqueología, ubicado en el elegante edificio que tienes ante ti. Aquí se exponen los vestigios del rico pasado de la ciudad, Leer más
Estamos en el paseo Romestang, una de las arterias principales de Vienne, repleta de restaurantes y tiendas de todo tipo. En la Edad Media este paseo se encontraba fuera de las murallas, se le llamó Romestang, puesto que es una denominación utilizada para designar Leer más
En el centro de esta rotonda, que une el paseo Brillier y el paseo Romestang, se encuentra el monumento conmemorativo. Esta gran estatua, que rinde homenaje a las víctimas de la Primera Guerra Mundial, representa un ángel realizado por el escultor de Leer más
Este bonito jardín a pocos metros del Ródano, se creó en el siglo XIX y fue renombrado como "Jardín del 8 de mayo de 1945", tras la Segunda Guerra Mundial. Con hermosas especies de flores y un centenar de variedades de árboles, Leer más
Un verdadero vestigio de la época romana, esta calzada de piedra ha resistido al paso de los siglos. En su día conducía a los grandes almacenes construidos a orillas del Ródano a lo largo del siglo I, ¡hace más de 2.000 años! Leer más
Aquí te encuentras frente a la iglesia San Pedro. No sólo es la iglesia más antigua de Vienne, sino que también es una de las más antiguas de Francia. Su estructura y sus planos se remontan a finales del siglo V. Leer más
Vienne es muy conocida por haber sido una de las ciudades galo-romanas más importantes de su época, pero también por haber sido más tarde una ciudad clave en la historia del cristianismo. Leer más
Aquí nos encontramos a orillas del Ródano, en el muelle Jean Jaures, que nos ofrece una magnífica vista de la otra ribera. Al otro lado del río ya no estamos en Vienne, sino que nos encontramos en Saint-Romain-en-Gal y Sainte-Colombe, Leer más
Esta enorme iglesia, o más bien abadía, se construyó inicialmente en el siglo VI o VII. Aunque no sabemos exactamente cuándo se edificó, al menos podemos afirmar que ya existía otra abadía antes de que se construyera esta, denominada San Andrés el Alto. Leer más
Aquí delante, tienes uno de los pocos templos romanos completamente conservados de Francia, junto con el de Nîmes. Aproxímate para verlo más de cerca. Auténtico legado de la época galo-romana de Vienne, fue construido durante el reinado del emperador Augusto, Leer más
El Ayuntamiento de Vienne se alza imponente sobre la plaza François Mitterrand, en pleno centro de la ciudad. Se encuentra situado en este lugar desde 1771, en lo que fue la mansión del marqués de Rachais. Leer más
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Para completar tu visita a la ciudad, es indispensable visitar su museo arqueológico, situado en Saint-Romain-en-Gal, al otro lado del Ródano. Aquí descubrirás restos de la antigüedad y galo-romanos que te trasladarán en el tiempo y te permitirán imaginar cómo era la ciudad de Vienne cuando se llamaba Viena. En este museo se puede contemplar más de 2.000 años de historia, se encuentra situado a poca distancia andando desde el centro de Vienne.
Aunque Vienne se visite por su rico patrimonio histórico, también atrae visitantes por los numerosos viñedos que la rodean. A pocos kilómetros de la ciudad, puedes visitar las bodegas y degustar el famoso Côte-Rôtie, un vino tinto elaborado con Syrah y en ocasiones Viognier, y el sabroso Condrieu, un vino blanco elaborado a base de Viognier. ¡Estos vinos son de imprescindible degustación si te encuentras visitando Vienne!
Para aquellos en busca de agradables caminatas por la naturaleza, el Parque Natural Regional del Pilat, que se extiende a unos veinte minutos en coche desde el centro de la ciudad, cuenta con numerosas rutas a pie, en bicicleta o a caballo. También merece la pena visitar algunos pueblecitos de este parque regional, que posee una gran variedad de paisajes.
Por último, no hay que olvidar que Lyon está a solo unos treinta kilómetros de Vienne. ¡La tercera ciudad de Francia merece totalmente la pena si aún te quedan uno o dos días libres! De hecho, en Navaway ofrecemos dos itinerarios para descubrir la que es conocida como la Ciudad de las Luces.
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DescargarPasear por el centro histórico de Vienne te permite descubrir la ciudad y su historia mientras contemplas vestigios de la época romana, como el templo de Augusto y Livia o el jardín arqueológico de Cibeles. Después, puedes disfrutar de un agradable paseo por las orillas del Ródano, un lugar ideal para relajarse.
Visitar Vienne en tres días es perfecto para explorar su rico patrimonio histórico, su cultura y sus paisajes. Comienza por los vestigios de la antigüedad con el teatro antiguo, el templo de Augusto y Livia y el jardín arqueológico de Cibeles. Luego, descubre la catedral de Saint-Maurice antes de perderte por las callejuelas del centro histórico y pasear junto al Ródano. El segundo día, sumérgete en la historia medieval con la abadía de Saint-André-le-Bas, y después sube al monte Pipet para disfrutar de una vista panorámica excepcional. Por la tarde, escápate a los viñedos de Côte-Rôtie o Condrieu, conocidos por sus prestigiosos vinos. El tercer día, explora los alrededores con una visita al sitio galorromano de Saint-Romain-en-Gal, donde un museo fascinante relata la historia de la región. Termina el día con un crucero por el Ródano para ver la ciudad desde otra perspectiva. Y si tienes un cuarto día, relájate en el mercado de Vienne, uno de los más grandes de Francia, y disfruta de una comida que celebra los productos locales.
Visitar Vienne es sumergirse en una ciudad con un patrimonio histórico excepcional, donde el legado romano convive con joyas medievales y una gastronomía auténtica. Situada en la región de Auvernia-Ródano-Alpes, a unos treinta kilómetros de Lyon, Vienne es famosa por sus impresionantes restos antiguos, como el templo de Augusto y Livia, perfectamente conservado, y su teatro romano, que cada verano acoge el famoso festival de jazz “Jazz à Vienne”. La ciudad también alberga un importante patrimonio religioso, con la catedral de Saint-Maurice, un edificio gótico a orillas del Ródano, y la abadía de Saint-André-le-Bas. A los amantes de los paseos les encantarán las orillas del Ródano, las callejuelas del centro histórico y el monte Pipet, desde donde se obtienen vistas magníficas de la ciudad.
Isère ofrece muchos lugares para pasear, y los aficionados al senderismo estarán encantados. El macizo de Chartreuse es ideal para caminar en plena naturaleza, sobre todo en los alrededores del monasterio de la Grande Chartreuse, donde se disfrutan paisajes boscosos y vistas panorámicas. El Vercors, con sus impresionantes acantilados y vastas mesetas, ofrece rutas accesibles para todos, como el sendero de las gargantas de la Bourne o el paso de la Bataille.
No hay una temporada ideal única para visitar Vienne: todo depende de tus preferencias y de lo que planees hacer. Cada verano, en julio, Vienne acoge el festival Jazz à Vienne, que atrae a 200.000 amantes de la música cada año. Se celebra en un entorno excepcional: el teatro antiguo. Como consecuencia, los alojamientos son más caros y escasos, así que conviene planificar con antelación. Si buscas un poco más de tranquilidad, la primavera es una buena opción. A diferencia del verano, las temperaturas son más suaves, los precios más bajos y será más fácil visitar los distintos sitios turísticos de esta ciudad, donde las huellas de la época romana aún son muy visibles.
Como en toda ciudad, el centro histórico es una visita imprescindible. En Vienne, aquí encontrarás los vestigios antiguos como el templo de Augusto y Livia, el teatro romano y la catedral de Saint-Maurice. Sus callejuelas medievales, llenas de tiendas y restaurantes, invitan a pasear sin rumbo. El barrio de Saint-Romain-en-Gal, al otro lado del Ródano, es un auténtico viaje en el tiempo gracias a su yacimiento arqueológico y su museo galorromano, que permiten entender mejor la historia de Vienne durante la época romana. Para una bonita vista panorámica, dirígete al barrio de Pipet, situado en lo alto de la ciudad. Allí se encuentra la capilla de Notre-Dame de Pipet, con una espectacular vista del Ródano y los tejados de Vienne.
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