Plaza Hoche

Llegas a la encantadora Plaza Hoche, bordeada de castaños y encantadoras residencias. Fue trazada a finales del siglo XIX por Jean-Baptiste Martenod, arquitecto de la ciudad. A principios del siglo XX, se celebraban aquí competiciones de tiro con arco, así como fiestas populares y bailes, acompañados de fuegos artificiales y conciertos. Verás que hay varios edificios que merecen la pena contemplar. El que hace esquina a la izquierda es el edificio Couasnon. Fue construido por el arquitecto del mismo nombre en 1908, siguiendo la inspiración del art nouveau. A su lado, en el número 2, se encuentra un edificio más reciente, pero igual de notable por su soberbio tejado de cristal. Su arquitectura fue premiada en 2020 en los Trophées de la Construction, un concurso anual para proyectos innovadores y positivos. Si te diriges al otro lado de la plaza, te toparás con un castillo sacado directamente del mundo de Walt Disney. Es el Hôtel Galicier, uno de los tesoros patrimoniales de Rennes. Este castillo de inspiración neogótica con tejado en forma de pimientero fue construido en 1893. Fue construido para la familia del mismo nombre, que vivía en el piso de arriba, con la planta baja reservada al personal de servicio. Hoy en día, la antigua mansión se ha dividido en varios pisos, por lo que lamentablemente no podrás visitarla.