Plaza des Lices

Es difícil de imaginar, pero fue aquí, en la plaza des Lices, donde el general Duguesclin, caballero por excelencia y gran figura de la Guerra de los Cien Años, libró su primera batalla. Era lo que se conocía como “campo cerrado medieval”, donde se celebraban torneos de caballeros. Por eso la plaza es toda a lo largo. Pero desde 1622, casi 300 productores toman la arena cada sábado para dar vida a uno de los mercados más grandes y bellos de Francia. ¡Toda una institución si has venido a pasar un fin de semana! Si no, tómate tu tiempo para admirar las grandes residencias de la ciudad y las casas con entramado de madera, así como El mercado cubierto de acero. Construidas en 1870, siguen el modelo de los nuevos mercados cubiertos de cristal y acero de París. Unos metros más adelante, verás el reloj de la plaza des Lices. Se trata de un lugar de encuentro típico de Rennes. Pero debes saber que hasta el siglo XVIII, este lugar tenía un significado completamente distinto y mucho menos agradable. Aquí se ahorcaba a los condenados. Encantador, ¿verdad? E irónicamente, la calle que lleva hasta allí se llama la calle de los Inocentes.