Fuente de los Muñecos

Esta fuente es una visita indispensable en Puebla. No por su belleza, aunque es bastante original, sino porque inspira una de las leyendas más famosas de Puebla. Se dice que los dos niños que ves dentro de la fuente existieron realmente… Se trata de una niña de 6 años y su hermano de 7, hijos de un trabajador del gobernador de la época, Maximino Ávila Camacho. Esto ocurría a principios del siglo XX. Cuenta la leyenda que los dos niños salieron una mañana hacia la escuela en medio de una fuerte tormenta, pero en realidad nunca llegaron a su destino. Es más, sus cuerpos nunca fueron encontrados, a pesar de una larga búsqueda. Se dedujo que simplemente habían caído en un pozo o en un agujero. Como homenaje a estos dos niños desaparecidos, el propietario de la granja donde trabajaba su padre decidió construir una fuente donde se pueden ver dos estatuas de los niños. Estatuas que, según algunos lugareños, ya han cobrado vida: algunas personas han declarado haberlas visto bajar de la fuente, caminar por la calle, reírse, y al final de la noche, ¡volver a subir a sus pedestales! Entonces, ¿crees que es verdad? Lo que sí puedes creer, en cualquier caso, es que gracias a estos dos personajes se llama Fuente de los Muñecos, ¡un monumento muy famoso en Puebla! ¡Hasta aquí la historia! Fíjate en el pedestal sobre el que están: es un buen ejemplo de cerámica de Talavera, típica de la región.