Can Forteza Rey

En la placita del Marqués de Palmer, no puedes perderte el sublime edificio modernista que se alza ante ti. El Modernismo es un estilo tan fugaz como maravilloso, lleno de curvas e inventiva, que dejó tras de sí verdaderos tesoros arquitectónicos y decorativos. Es el estilo Tiffany en Estados Unidos, el estilo Liberty en Italia, el Jugendstil en Alemania, el Modern Style en el Reino Unido, el estilo Sapin en Suiza, y por supuesto el Art Nouveau en Francia. Y como ya sabrás, sobre todo si has visitado alguna vez Barcelona, es famoso el Modernismo en Cataluña, liderado por el maestro del baile, Antoni Gaudí. En Cataluña, a diferencia del resto de Europa, la dimensión de este arte adquiere un sabor muy nacional, y el Modernismo catalán se distingue del movimiento internacional por su fuerte personalidad y el gran número de sus obras maestras. Aquí, en Palma, esta arquitectura audaz y elegante se vio influida por la presencia de Gaudí, que pasó aquí unos diez años tras recibir el encargo del obispo de la ciudad de renovar el coro de la catedral. Ahora puedes admirar una de las obras más emblemáticas del modernismo en Palma. El edificio fue diseñado por el joyero Lluis Forteza Rey en 1909 como vivienda para su familia. Como su construcción coincidió con la presencia de Antoni Gaudí, se cree que los dos hombres se conocieron, sobre todo porque el padre de Lluis se encargaba de la orfebrería de la catedral. Te dejo admirar la fachada y su abundante decoración de temas naturales. Encontrarás flores, animales y frutas, así como un rostro malhumorado rodeado por dos dragones en el primer piso. También llama la atención el uso de mosaicos multicolores dispuestos de forma irregular, que recuerdan a la Casa Battló de Barcelona, o los hermosos balcones de hierro forjado y la constante combinación de distintos materiales. Es el edificio más fotografiado de la ciudad, ¡y no nos sorprende!