Templo protestante

Siempre es extraño en este mundo de construcciones cuadradas encontrar un edificio redondo.

El que tienes delante es el templo protestante de Orleans. De hecho, es uno de los pocos templos redondos de Francia. Inspirado en la cultura antigua, tiene un hermoso frontón iónico rodeado de 4 columnas y un friso esculpido con máscaras de ángeles que enmarca la rotonda. Para verlo tal y como era en 1839, hay que imaginárselo coronado por una cúpula de madera recubierta de zinc.

En el siglo XVI existió por primera vez un lugar de culto protestante en la región de Orleans. Sin embargo, fue arrasado cuando Luis XIV decidió revocar el Edicto de Nantes de Enrique IV, que había puesto fin a las interminables Guerras de Religión un siglo antes. En la plaza se puede ver una estatua de Calvino, iniciador de la Reforma protestante junto con Martín Lutero.

Para recordar rápidamente los orígenes del protestantismo, Juan Calvino y Martín Lutero fueron sus fundadores. Estaban en total desacuerdo con la Iglesia católica en muchos puntos, sobre todo en la salvación del alma. En aquella época, existía un brillante sistema para salvarse de las llamas del infierno: las indulgencias, que consistían en dar dinero a la Iglesia para ser perdonado de los pecados.

La idea era que una buena acción compensaba una mala, y que no había mejor acción que ayudar a la Iglesia. Calvino, por su parte, pensaba que el Papa y sus sacerdotes se enriquecían a costa de la credulidad de los fieles, por lo que lanzó una reforma para volver a lo que ellos consideraban la base de los textos sagrados.

Pero todo esto se convirtió rápidamente en una cuestión política que enfrentaba a los soberanos de derecho divino con los príncipes europeos, para quienes hacerse protestantes era una lucha de poder contra el Papa.

El resto es historia: ocho sangrientas Guerras de Religión, en el caso de Francia.