Torreón de Lacataye

Aunque Mont-de-Marsan cuenta con numerosas maravillas patrimoniales, debes saber que hay una que llama la atención más que las otras juntas. El torreón Lacataye es el monumento emblemático de la ciudad, y es en realidad una casa fortificada creada por la fusión de dos casas románicas. Su construcción, en el siglo XIII, parece haber servido de puesto de observación y torre de defensa. Esto es muy probable, ya que el nombre “Lacataye” procede de la palabra castellana “castar”, que significa observar o vigilar. En 1860, Antoine Lacaze, alcalde de Mont-de-Marsan, restauró el edificio antes de dejarlo en herencia a la ciudad para albergar tropas. Cuartel departamental, internado femenino, centro de gimnasia y taller municipal son algunos de los usos a los que se destinó el torreón de Lacataye durante los siglos XIX y XX. Y acaso en todo esto, no hubo una sola idea de reconversión cultural. Por supuesto que la hubo, pero solo se hizo a partir de 1968, año en que se inauguró el museo Despiau-Wlérick, dedicado a la escultura figurativa. Combinación de historia y obras maestras artísticas, ¡el torreón de Lacataye lo tiene todo!