1. Los museos
Estás en el interior de una de las mayores estructuras fortificadas de Europa y, sin duda, de la más hermosa de Italia. Es el espacio artístico más importante de Milán. Leer más
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7,2 km
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¡Bienvenido a Milán! Capital de la moda, del diseño… y de muchas otras sorpresas. Porque detrás de sus fachadas elegantes y de ese aire de ciudad acelerada, Milán esconde una auténtica dulzura de vivir, una historia agitada y una personalidad muy marcada. Estás a punto de descubrir una ciudad que ha sido conquistada, destruida, reconstruida, transformada… y que todavía hoy sigue cautivando al mundo entero. Y si impresiona con su majestuoso Duomo, sus prestigiosos museos o su imponente fortaleza, también enamora con sus barrios bohemios, sus plazas medievales y sus secretos mejor guardados. Pero Milán es, sobre todo, una atmósfera. Una magia que aparece a la hora del aperitivo, cuando la dolce vita se adueña de las calles y todos se reúnen alrededor de una copa. Así que abre bien los ojos, afina el oído y déjate llevar. Este recorrido de 7 km te llevará a descubrir todas las caras de Milán: las más famosas y las más inesperadas.
Estás en el interior de una de las mayores estructuras fortificadas de Europa y, sin duda, de la más hermosa de Italia. Es el espacio artístico más importante de Milán. Leer más
Después de tanta cultura, nada como un poco de aire puro. El precioso Parque Sempione, de estilo inglés, te ofrece 40 hectáreas para pasear y desconectar de la ciudad. Leer más
El hermoso Arco de Triunfo que ves al otro lado del parque es el Arco della Pace, es decir, el Arco de la Paz. Si te recuerda a su homólogo parisino, es porque fue construido en 1807, durante la época napoleónica. Leer más
La Via Dante, por la que caminas ahora, une el Castillo Sforzesco con la Plaza del Duomo. Se abrió en 1888 como vía de conexión directa con el castillo, y no es de extrañar que sea la calle más animada de Milán. Leer más
Los vestigios de la época romana son discretos en Milán, pero debes saber que la ciudad fue una importante urbe romana. Leer más
Detente en la plaza financiera para ver esta estatua insolente y sorprendente. Fue un regalo del famoso artista contemporáneo Maurizio Cattelan, con la única condición de que se colocara frente a la Bolsa. El alcalde, bastante valiente, aceptó. Leer más
¡Seguro estás asombrado, y no es para menos! Te encuentras frente a una de las catedrales más grandes y más altas del mundo Leer más
En la época medieval, aquí estarías en pleno corazón de la ciudad. La Piazza Mercanti era el centro comercial y gubernamental de Milán. Mira a tu alrededor y escucha lo que estos edificios tienen que contarte. Leer más
Lo sientes, lo sabes: estás en la plaza central de Milán. Aquí late el corazón de la ciudad y aquí empieza todo. Los milaneses se reúnen en este lugar para celebrar las grandes ocasiones. Leer más
Ahora tienes ante ti el Palacio Real, construido por iniciativa de María Teresa de Austria, cuando el ducado de Milán estaba en manos de la casa de Habsburgo. Leer más
La entrada a la galería más hermosa de Europa impresiona, y tu mirada se dirige de inmediato hacia su fastuosa e imponente bóveda de cristal. Es preciosa de arriba abajo; ni un museo lo haría mejor. Leer más
Te encuentras en la plaza San Fedele, frente a su iglesia jesuita del mismo nombre. Fue la primera residencia de los jesuitas en Milán. Leer más
Estás frente al Palazzo Marino, un magnífico palacete del siglo XV construido para una familia de ricos banqueros genoveses. Pasó a ser propiedad del Estado en 1781 y hoy alberga la sede del ayuntamiento de Milán. Leer más
Otra iglesia, pensarás. Y no es que quiera llevarte a todas las iglesias de Milán, pero créeme: entra en el pequeño edificio que hay justo a la izquierda de la iglesia y verás que, en realidad, es un osario. Puedes visitarlo; está a la derecha nada más entrar. Leer más
En la intersección de las dos galerías se encuentra lo que, como imaginarás, llaman el octógono. Está coronado por una impresionante cúpula y rodeado por las alegorías de los cuatro continentes, y es realmente una maravilla. Leer más
Aquí la expresión “No juzgues un libro por su portada” cobra sentido. Sí, puede que te decepcione al principio. Leer más
Verdadero oasis en pleno centro de Milán, este jardín botánico es una grata sorpresa que te conduce directamente al famoso Palacio de Brera y a su célebre Pinacoteca. Leer más
Has llegado al célebre Palacio de Brera, que reúne varias instituciones. La Pinacoteca de Brera es uno de los museos más importantes de Italia, junto con la Galería Uffizi de Florencia y los Museos Vaticanos de Roma. Leer más
El emperador aparece representado como un dios Marte desarmado y pacificador, un desnudo triunfante pensado para estar en un vestíbulo y no en una plaza. Leer más
Estás en pleno corazón de un barrio bohemio, artístico y pintoresco. Bienvenido al centro de Brera. Calles adoquinadas como las que tanto nos gustan, salpicadas de tiendas, bares y restaurantes. Leer más
Este magnífico edificio en la esquina es el Palacio Bonacossa, sede del Museo de Arte y Ciencia de Milán. El museo ocupa el antiguo monasterio de San Vittore, fundado en el siglo XVI. Leer más
Estás cruzando la arteria que conecta la Plaza del Duomo con la Plaza San Babila. Es la segunda gran zona peatonal de la ciudad y el lugar perfecto si te apetece hacer unas compras. Leer más
Emblema de Milán, el Castillo Sforzesco resume por sí solo toda la historia de la ciudad. Desde sus días como fortaleza hasta su actual función como conjunto museístico, ha sido escenario de múltiples dominaciones extranjeras. Leer más
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Admira la majestuosidad del Duomo y disfruta de una vista impresionante de Milán desde sus terrazas.
Aunque no seas un experto en moda, seguro que sabes que Milán es el lugar imprescindible para cualquier amante del estilo que se precie. Si quieres darle buen uso a tu tarjeta y vestirte con las creaciones de los grandes, date un paseo por el “Quadrilatero della moda”, donde se reúnen las marcas italianas más prestigiosas del panorama internacional.
No te pierdas la oportunidad de ver EN DIRECTO la famosa obra de Leonardo da Vinci: “La Última Cena”, en la iglesia de Santa Maria delle Grazie. Ten en cuenta que las entradas son limitadas para preservar el lugar, así que conviene reservar con antelación. Otra iglesia que merece muchísimo
El inmenso Cementerio Monumental de Milán también merece una visita. La entrada es gratuita, aunque permanece cerrado los lunes. Es un auténtico museo insólito que reúne numerosas esculturas, mausoleos y obras de arte funerario. Sencillamente grandioso.
También te recomendamos pasear por las calles peatonales de Corso Como y disfrutar de un agradable recorrido junto a los canales de los Navigli a la hora del aperitivo.
Y no olvides recorrer la ciudad como un auténtico local a bordo del emblemático tranvía naranja.
¿Te apetece escapar del bullicio milanés por un día? Los alrededores de Milán están llenos de tesoros a los que puedes llegar en tren o en coche. Aquí tienes algunas ideas de excursiones para descubrir otra cara de Lombardía… ¡y más allá!
A menos de una hora en tren desde Milán, el lago de Como te recibe con sus lujosas villas, jardines en terrazas y pintorescos pueblos. Pasea por Bellagio, toma un barco hasta Varenna o piérdete por las callejuelas de Como. El entorno es simplemente mágico, entre aguas brillantes y cumbres alpinas.
A menudo eclipsada por Milán, Bérgamo merece sin duda una visita. Su Città Alta, encaramada en una colina y rodeada de murallas venecianas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, cautiva con su ambiente medieval. Sube en funicular, pasea por la Piazza Vecchia y déjate conquistar por las vistas panorámicas de los Alpes.
Cuna de Antonio Stradivari, Cremona es un destino ideal para los amantes de la música clásica. Visita el Museo del Violín, descubre los talleres de luthería que aún siguen en funcionamiento y disfruta del ambiente tranquilo de esta encantadora ciudad de arte a orillas del Po.
Situada a 40 km al sur de Milán, Pavía encanta con su rico patrimonio: la Cartuja (Certosa), una obra maestra del arte gótico lombardo, ya justifica por sí sola la visita. Su centro histórico, con torres medievales y un ambiente universitario, invita a recorrerlo y descubrirlo.
Un poco más lejos, pero accesible en tren o en coche, el lago Mayor te sumerge en un ambiente lleno de refinamiento. No te pierdas las islas Borromeas, auténticas joyas barrocas que parecen flotar sobre el agua. Stresa, una elegante localidad a orillas del lago, es el punto de partida perfecto para tus exploraciones.
A un paso de Milán, Monza es conocida por su circuito de Fórmula 1, pero tiene mucho más que ofrecer. Su parque real, uno de los más grandes de Europa, rodea una suntuosa villa del siglo XVIII. Un entorno perfecto para un paseo al aire libre.
Explora el arte, los paisajes alpinos y el encanto de los lagos que rodean Milán.
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En Italia, el fútbol es casi una religión, y quizás aún más en Milán. La ciudad es la sede de dos clubes de fama mundial: el AC Milan y el Inter de Milán. Lo curioso es que ambos comparten el mismo estadio.
Sin embargo, el nombre del estadio cambia según el equipo que juegue, por eso no se menciona arriba… ¡así nadie se siente excluido! Cuando el AC Milan juega como local, el estadio se llama San Siro, el barrio donde está situado. En cambio, cuando…
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Descripción: Terminemos esta lista de hoteles con clase y sobriedad con el Maison Borella. Este lujosísimo hotel de cuatro estrellas está situado…
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Ubicación: Alzaia Naviglio Grande 8, Navigli, 20144 Milán.
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Para visitar Milán sin complicaciones, deja el coche cerca de tu alojamiento. Será mucho más fácil moverse en transporte público que en coche. Milán cuenta con 4 líneas de metro, formando la red de metro más extensa de Italia, que conecta toda la ciudad. Otra opción igual de práctica es el tranvía. La ciudad también tiene una de las redes de tranvía más importantes de la península, con 17 líneas disponibles para ti.
Varios barrios de Milán son imprescindibles durante tu visita. En primer lugar, el Centro Storico (centro histórico) es el barrio esencial de la capital lombarda. Aquí se encuentra la Catedral de Milán, verdadero símbolo de la ciudad. También podrás visitar la Galleria Vittorio Emanuele II, el prestigioso y histórico centro comercial de Milán. Para un entorno igual de encantador, el barrio de Brera te maravillará sin duda. Se ubica al norte del Duomo y es un barrio bohemio muy elegante, repleto de galerías de arte que adornan sus calles. Después de la década de 1950, muchos artistas se instalaron en esta zona, transformándola y convirtiéndola hoy en uno de los barrios más emblemáticos de Milán.
Visitar Milán en un día es todo un desafío, por lo que tendrás que optimizar tu tiempo para aprovechar la ciudad al máximo. Comienza en el Centro Storico con una visita a la Catedral de Milán. Puedes subir a los tejados de la catedral para disfrutar de una vista panorámica de toda la ciudad. Continúa tu recorrido por la Galleria Vittorio Emanuele II, que se encuentra cerca del Duomo. Otro lugar imprescindible, situado junto a los dos anteriores, es el Teatro alla Scala. Construido en el siglo XVIII, este teatro de ópera es reconocido internacionalmente.
Después de una mañana tan intensa, disfruta de las especialidades locales en un restaurante tradicional. Por la tarde, visita el imponente Castillo de los Sforza, construido en el siglo XV por Francesco Sforza, entonces duque de Milán. Justo al lado del castillo se encuentra el Parco Sempione, un lugar ideal para relajarte entre la vegetación y la sombra durante los días calurosos.
Al final de la tarde, pasea por el barrio de Navigli. Camina a lo largo de los canales y disfruta de un Spritz o un Prosecco en una terraza, en un ambiente relajado y agradable.
Italia en su conjunto es un país impresionante. Su arquitectura y su historia son invaluables y han inspirado gran parte del mundo occidental. Por ello, visitar Milán definitivamente vale la pena, aunque sea solo por la Catedral de Milán. La ciudad también es reconocida como una de las capitales de la moda, junto con París, Nueva York y Londres. Ya sea por su gastronomía, su arquitectura o su cultura, Milán merece claramente una visita.
Milán es una ciudad bastante segura, pero como en cualquier gran ciudad, hay algunos barrios que conviene evitar, sobre todo por la noche. Entre ellos, el área de la Estación Central. Digamos que los alrededores de una estación central nunca son los más recomendables, sea en la ciudad que sea, ya que suelen atraer a carteristas y personas con malas intenciones. Además, es recomendable mantenerse alerta en ciertas zonas del barrio de San Siro. Aunque es un lugar emblemático de Milán por su estadio, en el área hay varios conjuntos de viviendas sociales donde puede ser peligroso estar de noche.
En dos días, ya tendrás la oportunidad de ver mucho más que en una sola jornada. Tras recorrer el centro histórico de Milán con su Catedral, el Castillo de los Sforza y la Galleria Vittorio Emanuele II, podrás adentrarte en el universo de Leonardo da Vinci visitando Santa Maria delle Grazie. Este monasterio alberga una de las obras más famosas del mundo: «La Última Cena», que representa la última comida de Cristo. Asegúrate de reservar tu entrada con antelación para evitar inconvenientes.
Continúa tu visita en uno de los edificios más antiguos de toda Lombardía: la Basílica de San Ambrosio. Al ver su estado actual, es difícil imaginar que fue construida entre los años 379 y 386. Por la tarde, sumérgete en la capital de la moda y el diseño visitando la Fondazione Prada. Y para terminar, puedes recorrer los barrios de Porta Nuova e Isola, donde descubrirás zonas muy modernas que muestran un contraste fascinante entre la arquitectura de distintas épocas.
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