Vistas del Palacio del Faro

A tu derecha puedes ver a pesar de la verja, una hermosa vista de parte de la Ciudad focense. Lo más interesante aquí, es que a lo lejos se divisa el magnífico Palacio del Faro, que aparece asomado al mar dejando ver su tejado anaranjado. Fue Napoleón III quien construyó este magnífico palacio, destinado a convertirse en la residencia de su esposa, la emperatriz Eugenia, la cual nunca llegó a poner un pie en su interior. Su construcción comenzó en 1858 y finalizó 13 años más tarde, en 1871, justo después de la caída del Imperio, lo que impidió a Napoleón III ver terminadas las obras. Cedido a la ciudad, el palacio conservó su esplendor y se convirtió en sede de la facultad de Medicina, antes de convertirse en Palacio de Congresos y sede de la Universidad de Aix-Marsella en 1997. A su izquierda, y mucho más cerca de ti se halla el imponente fuerte de San Nicolás, el segundo fuerte de la ciudad junto con el de San Juan, construido en el siglo XVII durante el mandato de Luis XIV. Si bien la versión oficial es que el Rey mandó construir estas fortificaciones para proteger la ciudad, en realidad fue en gran parte para recuperar el control sobre sus habitantes, aprovechando que este lugar era un punto estratégico. Sólo se tardaron cuatro años en construir este imponente fuerte justo frente al de Saint-Jean. Utilizado como prisión militar hasta el final de la Segunda Guerra Mundial , se encuentra actualmente dividido en dos partes: una alberga la administración militar, y el comedor de las tropas, donde comen los soldados; y la otra está abierta a las visitas guiadas que ofrece la Oficina de Turismo.