Las dinastías marroquíes

Mientras paseamos por la calle Lalla Rkia, te propongo hacer un repaso de las diferentes dinastías que han gobernado Marruecos a lo largo de su historia. Si bien algunas de ellas han dejado un legado que no deja lugar a dudas sobre su poder y dominación, otras han sido mucho más discretas. Mucho antes de la llegada de las primeras dinastías, Marruecos ya estaba ocupado por los bereberes. Los árabes llegaron al Magreb durante el siglo VII, y la primera dinastía en asentarse en una parte de Marruecos fue la de los Omeyas. En el año 789 se fundó el primer Estado en suelo marroquí, gobernado por Idris I, quien fundó así la dinastía idrisí, que fue la primera en gobernar oficialmente el Estado de Marruecos. Sin embargo, con el tiempo perdió su influencia y el Estado de entonces acabó por dejar de existir. La historia de Marruecos comenzó realmente con la llegada de los almorávides que fundaron Marrakech en el siglo XI y la convirtieron en la capital del territorio. Estos conquistaron el norte del país, así como Andalucía, convirtiendo Marruecos en un verdadero país. Poco menos de un siglo después de su llegada, fueron sustituidos por los almohades, quienes dejaron tras de sí un rico patrimonio arquitectónico y cultural y ampliaron aún más su territorio en Andalucía y a lo largo del Mediterráneo. Pero por su parte, los españoles se negaron a ceder y ganaron una batalla en 1212. Fue todo un revés para los almohades, que acabaron perdiendo su influencia y dieron paso a los meriníes, una nueva dinastía que gobernó el país a partir de 1269. A partir de ese momento, Marruecos vive una época oscura, marcada por revueltas y sublevaciones. Dos siglos más tarde, la familia real es masacrada y sustituida por la dinastía wattásida. Pero esta dinastía, que adoptó Fez como capital, no tuvo mejores resultados y no consiguió proteger el país: Andalucía fue totalmente recuperada por los españoles. Esa dinastía se extinguió en 1549, cuando los saadíes tomaron el poder. Establecieron Marrakech como capital y devolvieron al país todo su poder y riqueza. Su reinado, marcado por las victorias contra Portugal, la construcción de suntuosos palacios y una expansión sin precedentes, duró hasta 1659, cuando su sultán fue asesinado y sustituido por la dinastía alauí. Una dinastía que sigue al frente de Marruecos desde hace 400 años. En la actualidad, el monarca Mohammed VI gobierna el Reino de Marruecos, y es el vigésimo tercer monarca de la dinastía alauí: es la que más tiempo ha permanecido en el poder de todas las que han gobernado el país, ¡y se trata de una de las familias reales más antiguas del mundo!