Plaza de Oriente

Estás en el lado oriental del palacio real, de ahí que la plaza que atraviesas se llame Plaza de Oriente. Simple y eficaz. Se la conoce sobre todo, por su encantador conjunto de monumentos, que incluye parte del palacio real, el teatro y una colección de esculturas de veinte reyes españoles que, aunque estaban destinadas a decorar el palacio, finalmente acabaron en la plaza. La estatua ecuestre de Felipe IV, situada en el centro,  fue creada por Pietro Taca; a partir de un diseño de Velázquez, contanto con la ayuda de Galileo, para asegurar su estabilidad. Y con un nombre así, te puedes imaginar que este también es un lugar ideal, para contemplar las cálidas luces del atardecer que tiñe las blancas fachadas de estos bellos edificios.