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Bienvenido a Luxemburgo ¿Qué sabes de este lugar y de su capital, aparte de que es un mini-país y de que algunos de sus productos son especialmente asequibles? Ciudad ultra-cosmopolita, con más del 60% de su población de origen extranjero, Luxemburgo es una sorprendente ciudad de contrastes permanentes. Antigua pequeña fortaleza, sus restos se mezclan con la ciudad nueva, ¡para una visita llena de sorpresas! Luxemburgo es la primera ciudad elegida dos veces Capital Europea de la Cultura. Su centro histórico es Patrimonio Mundial de la UNESCO, su catedral es única en el país, sus acantilados esconden misteriosos túneles subterráneos y su pequeño río, el Pétrusse, acoge cada año la Carrera de Patos. Dan ganas de venir, ¿verdad? La ciudad de Luxemburgo, como Estado, es un lugar aparte, y está orgullosa de ello. Su refrán es “Mir wëlle bleiwe wat mir sinn” ¿No entiendes el luxemburgués? Significa “Queremos seguir siendo lo que somos”. Hasta ahora, ¡reto conseguido!
Ya estás en el balcón más bonito de Europa. Y no lo digo yo, lo dice el escritor luxemburgués Batty Weber. El sendero de la Corniche sigue las antiguas murallas construidas en el siglo XVII por españoles y franceses. Leer más
La estatua impresa en 3D que ves aquí es obra del artista luxemburgués Serge Ecker. La creación luxemburguesa está estrechamente vinculada a la leyenda de Melusina, la compañera del conde Sigefroid. Leer más
Este pequeño puente sobre el Alzette, que forma parte de las antiguas fortificaciones, es la puerta de entrada al barrio de Grund. Leer más
Aprovecha que te encuentras en las alturas de las antiguas fortificaciones, para admirar esta hermosa vista del barrio de Grund, en la ciudad baja de Luxemburgo. Leer más
Aquí te encuentras en el corazón del barrio de Grund, frente a la abadía de Neumünster. En 1547, los monjes benedictinos transformaron el antiguo hospital Saint-Jean en una nueva abadía, ya que la suya acababa de ser destruida. Leer más
La puerta monumental a tu izquierda es la Torre de Jacob, también conocida como Dinselpuert. Leer más
El río Alzette nos rodea por los tres lados. Esta es la Meseta del Rham, ahora abierta al público tras 5 años de obras de restauración. Este lugar es un verdadero símbolo de la arquitectura militar de la ciudad. Leer más
Ahora toma el ascensor gratuito del Grund, que te permitirá subir sin esfuerzo a la meseta de Saint-Esprit. Leer más
El hermoso edificio renacentista del siglo XVI que ves aquí es el Palacio Gran Ducal. Estamos en pleno casco antiguo. Aquí, en 1554, un rayo cayó sobre la iglesia de los Jacobinos e hizo explotar un depósito de pólvora. Leer más
Aquí te encuentras en la plaza favorita de los luxemburgueses, conocida como el “Salón de la Ciudad”. La Plaza de Armas, rodeada de cafés y restaurantes, es sin duda la plaza más agradable de Luxemburgo. Leer más
Esta es la catedral de Notre-Dame de Luxemburgo. Se construyó a principios del siglo XVII, cuando la ciudad pertenecía a los Países Bajos españoles, como iglesia del Colegio de los Jesuitas. Leer más
Estás pasando frente a la iglesia neorrománica de Saint-Alphonse. Fundada en 1856, la historia de su construcción está estrechamente ligada al control prusiano de la ciudad, que no permitió a los arquitectos seguir los planos originales. Leer más
Unas palabras sobre la estatua que ves en el centro de la plaza. Representa a la Gran Duquesa Charlotte. Una heroína poco conocida, de carácter fuerte, que merece ser recordada. No estaba destinada a acabar en el trono de Luxemburgo, pero a veces el destino cambia de opinión y la joven Charlotte se convirtió en Gran Duquesa en 1919. Leer más
Ahora tomamos el nuevo gran ascensor de vidrio de Pfaffenthal. Viajar en un ascensor de cristal es una forma estupenda de contemplar todo el paisaje. Leer más
Hemos llegado a la plaza de la Constitución, situada en el antiguo bastión Beck. Desde aquí se disfruta de una magnífica vista del valle del Pétrusse y del puente Adolphe. El monumento del centro es la Gëlle Fra, o la dama de oro, inaugurada en 1923 como monumento del recuerdo a los soldados caídos en la Gran Guerra. Leer más
Has llegado a la ciudad judicial de Luxemburgo. Si estuviéramos en 1234, habrías llegado al corazón del Convento del Espíritu Santo, en la plaza del mismo nombre. En el siglo XIV, la meseta pasó a formar parte de la tercera muralla de la ciudad Leer más
Aquí empezó todo. En el año 963, el conde de Sigefroid, descendiente de Carlomagno, adquirió este promontorio rocoso a la abadía de Saint-Maximin-de-Trèves y estableció allí su castillo. Desde la época romana existía allí una pequeña fortaleza llamada Lucilinburhuc. Leer más
Aquí te encuentras en la entrada de las famosas casamatas de Bock. Son la atracción más famosa de la ciudad de Luxemburgo y atraen a más de 100.000 visitantes al año. Las casamatas están inscritas en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1994. Leer más
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18 audioguides ludiques avec commentaires historiques, anecdotes et quelques mystères
Un día entre naturaleza, historia y castillos encantadores.
Luxemburgo es una ciudad muy pequeña, por lo que si ya la has visitado, solo puedo aconsejarle que dé un paso más en tu descubrimiento y explores sus alrededores.
El cementerio americano de la ciudad de Hamm, a solo 35 km de Luxemburgo, merece una visita. El inmenso césped alberga 5.076 cruces blancas dispuestas en semicírculo alrededor de una capilla conmemorativa. Es el lugar de descanso de los soldados estadounidenses que murieron durante la batalla de las Ardenas contra el ejército alemán en 1944. Verás en particular la tumba del General George S. Patton, comandante de la 3ª División estadounidense, que pidió ser enterrado aquí.
A 30 minutos al este de Luxemburgo, en la frontera con Alemania, se encuentra la ciudad más antigua del país, Echternach, conocida por su aire medieval, sus calles empedradas y su majestuosa abadía. En su cripta, podrás ver un sarcófago merovingio de piedra que contiene las reliquias de San Willibrord, patrón del Gran Ducado, que hizo construir aquí la primera iglesia hacia el año 700 d.C. También podrás descubrir la mayor villa romana al norte de los Alpes. Sus magníficos frescos, mosaicos, jardines y estanques, así como su museo arqueológico, seducirán a los aficionados. La ciudad es también un excelente punto de partida para explorar la región de Mullerthal, apodada “Pequeña Suiza” por la naturaleza salvaje que la cubre. Desde Echternach parten numerosas rutas de senderismo. No te pierdas el Georges du Loup, a solo 1,5 km del centro de la ciudad (Wollefsschlucht). Con muros de hasta 50 metros de altura, es uno de los lugares más espectaculares de la zona. También puedes visitar la cascada de Schiessentümpel, 10 km más adelante. Y si eres un auténtico excursionista, podrás descubrir estos y otros muchos parajes naturales siguiendo el famoso sendero de Mullerthal, ¡sin duda la excursión más bonita de Luxemburgo! Hay tres recorridos posibles, con extensiones adicionales. Dedica entre 3 y 6 días a completar los 112 km del sendero. En verano, podrás refrescarse y disfrutar del lago de Echternach y sus actividades deportivas, a la entrada de la ciudad.
Si eres un amante de los buenos vinos, ¡dirígete a los valles del Mosela! Los viñedos luxemburgueses son pequeños pero excelentes, y ofrecen unos vinos blancos de gran calidad. El Riesling es sin duda la variedad de uva más famosa, pero el Crémant es también uno de los vinos imprescindibles de la región. También encontrarás los fantásticos Rivaners y Auxerrois, Pinot blanc y Pinot gris, Chardonnay y Gewürztraminer. Aunque los vinos blancos acaparen todo el protagonismo, déjate sorprender por los potentes y oscuros tintos luxemburgueses.
A poco menos de una hora de Luxemburgo se encuentra uno de los monumentos más emblemáticos del país, el castillo de Vianden. Situada en las Ardenas, en la frontera con Alemania, la ciudadela de Vianden es una visita imperdible en Luxemburgo. Construido entre los siglos XI y XIV, el lugar impresiona por su encanto místico, en lo alto de un promontorio rocoso que domina bosques impenetrables. Cuidadosamente restaurado como castillo histórico, ofrece una cautivadora visita al corazón de 1.000 años de historia.
Otra visita igual de pintoresca es la aldea de Esch-sur-Sûre. Situada en un meandro del río y dominada por el castillo más antiguo del Gran Ducado, es un romántico descubrimiento de la naturaleza y el patrimonio. Las ruinas fortificadas del castillo son de libre acceso y ofrecen una vista de postal del pueblo. También puedes visitar el mirador “Belvédère”, en el centro de descubrimiento forestal “Burfelt”, para disfrutar de una vista impresionante del lago de la Haute-Sûre, 70 metros más abajo.
Para un momento de relajación, acércate a la pequeña ciudad de Mondorf les bains, para darte un chapuzón en sus termas, situadas en 45 hectáreas de vegetación. Fundadas en 1847, son las únicas termas del país y prometen un descanso atemporal y beneficioso para la salud.
Para completar tu estancia, descubre los sabores locales, explora la ciudad de una manera diferente y disfruta de una experiencia única.
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Es evidente que una visita histórica es imprescindible. Se trata de un monumento de prestigio europeo, clasificado entre los 21 castillos más bellos del mundo.
Construido entre los siglos XI y XIV sobre los cimientos de un castillo romano y un refugio carolingio, según los historiadores, fue la residencia de…
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Información útil: Para nuestra sorpresa, no es obligatorio reservar la visita. El castillo está abierto todos los días a partir de las 10 h, excepto el 1 de enero y el 25 de diciembre.
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El establecimiento se encuentra justo entre la ciudad y el campo, por lo que es muy probable que, al final de tu estancia, te entren muchas ganas…
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Puntos destacado
Internet de alta velocidad gratuito
Ubicado a 5 minutos del centro de la ciudad
Bar/salón
Restaurante (muy bien valorado por la crítica)
Desayuno disponible
Aspectos a tener en cuenta
Aparcamiento privado de pago
Ubicación : 2 Place Sainte Cunegonde, 1367 Luxembourg
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