Jardín del Marquesado de la Quinta Roja

Te encuentras en el corazón de los jardines del marquesado de la Quinta Roja. También se les conoce como Jardines de la Victoria. Se construyeron en el siglo XIX sobre una plantación de árboles frutales perteneciente al Marquesado de la Quinta Roja, que vivía en las cercanías. Lo que ocurrió fue que su hijo, Diego Ponte del Castillo, murió en abril de 1880. Como era masón, el obispo no permitió que fuera enterrado en el panteón familiar. Tuvo que ser enterrado en otra zona del cementerio reservada a los no católicos. Humillada y de luto, la marquesa encargó a un paisajista francés la construcción de un inmenso jardín repleto de símbolos masónicos, la mayoría desaparecidos desde entonces, y en cuya cima se instaló un mausoleo de mármol de Lyon para albergar la sepultura de Don Diego. Al final, el hijo de la marquesa pudo volver al panteón familiar, pero el mausoleo permanece como protesta silenciosa. Hoy, situado en lo alto de las 7 terrazas que descienden por las laderas del jardín, ofrece una hermosa vista de la llanura de La Orotava, las laderas del volcán y el mar.