Cinéma La Rampa

Negro, rojo, gris y naranja son los colores elegidos para resaltar la inscripción La Rampa, pintada en lo alto a tu derecha. El mensaje es claro: tu llegada a la calle principal del barrio del Vedado es inminente. Pero eso no es todo. Estas 7 grandes letras, en una tipografía típica de los años 70, son también el nombre de la institución que ocupa la esquina de la Calle O., el icónico cine La Rampa. Si hemos de creer lo que dicen, es una de las mejores direcciones de ocio de la manzana, y lo ha sido desde 1955. Pero entonces, La Rampa no era un cine. Los lugareños venían aquí a «Boleras Tony» para derribar tantos bolos como fuera posible durante las partidas de bolos. Más tarde, el local se amplió e incluso se levantó para convertirse, sucesivamente, en cafetería, bar, oficinas y, finalmente, en cine. ¡Y no un cine cualquiera! Como 4 de sus congéneres, el cine La Rampa tiene algunos privilegios. No sólo alberga los archivos del cine cubano, sino que también proyecta preestrenos de películas que más tarde se exhibirán en otros cines del país. Su excelente calidad de sonido y proyección, que pasó a ser digital en 2015, es sin duda un factor que contribuye a ello. Además de sus retrospectivas, el cine La Rampa acoge varios festivales a lo largo del año. Uno de ellos es el Festival de Cine Latinoamericano, que se celebra durante la primera quincena de diciembre.