Puerta de San Miguel

Estás ante la puerta de Saint-Michel, la imponente entrada a la ciudad medieval. Como habrás notado, Guérande sigue hoy rodeada por sus potentes murallas, una de las mejor conservadas de Francia, pese a que apenas ha sido restaurada a lo largo de su historia. Mide 1.300 metros en total y cuenta con 6 torres y 4 puertas fortificadas que antaño defendían la ciudad. Una séptima torre formaba parte del recinto, pero fue destruida en 1818.

Aun así, las murallas fueron clasificadas Monumento Histórico en 1877 por su extraordinaria conservación. No es casualidad que la ciudad sea conocida como la Carcasona del Oeste. Fue gracias al duque de Bretaña, en el siglo XIV, que se inició la construcción de las murallas, ya que él financió el proyecto para proteger la ciudad.

Así, entre los siglos XIV y XV, se levantaron estas imponentes murallas de piedra, reforzadas con el tiempo. En ese mismo periodo se construyó la puerta de Saint-Michel, auténtico símbolo de la ciudad. Sus grandes dimensiones la convirtieron en la entrada principal al recinto medieval, pero no era su única función: también servía de residencia al gobernador de la ciudad. D

urante la Revolución se transformó en prisión, y entre 1815 y 1954 albergó las oficinas del Ayuntamiento. Por eso, lo que tienes ante ti es un edificio a la vez defensivo, con sus matacanes, troneras y saeteras, y elegante, con una arquitectura que refleja el prestigio de la ciudad en aquella época. Aquí se controlaba la entrada y salida de personas y mercancías, se aplicaban impuestos y se vigilaban los alrededores desde lo alto, que alcanza 24 metros.

En su momento, contaba con dos puentes levadizos, fosos y un rastrillo para reforzar la defensa. Justo encima de la entrada, puedes ver el escudo de la ciudad. Si lo deseas, puedes visitar el interior de este monumento histórico, ya que actualmente alberga el Museo de Guérande. En él descubrirás salas medievales, exposiciones, maquetas y actividades interactivas para conocer a fondo este emblemático edificio y toda la ciudad medieval.

La visita también permite recorrer las murallas y hacer un auténtico viaje al pasado, a la época de la Edad Media. Incluso hay un recorrido específico para niños y visitas guiadas programadas con regularidad. No olvides consultar los días y horarios de apertura para poder disfrutar de la experiencia.