Monumento al Genocidio de los Pónticos

Estás frente a un monumento que, a primera vista, podría pasar desapercibido en este pequeño parque. Sin embargo, guarda la memoria de una de las tragedias más desconocidas del siglo XX: el genocidio de los griegos pónticos.

Estas comunidades griegas vivían desde la Antigüedad en las orillas del mar Negro, en la región llamada el Ponto, en la actual Turquía nororiental. Entre 1914 y 1923 fueron víctimas de deportaciones forzadas, masacres, hambrunas organizadas y conversiones impuestas por el Imperio otomano. Se estima que cerca de 350 000 hombres, mujeres y niños perdieron la vida, mientras que cientos de miles fueron expulsados de sus tierras. Este destino trágico formó parte de un proceso más amplio que también golpeó a armenios y asirios, comunidades cristianas de Asia Menor. Que este monumento se encuentre aquí, en Santorini, lejos del mar Negro, se debe a que la memoria de aquellos refugiados está hoy repartida por toda Grecia.

Cada 19 de mayo, día oficial de conmemoración, se celebran ceremonias para recordar ese pasado y rendir homenaje a la resiliencia de un pueblo arrancado de sus raíces. Al detenerte aquí, conectas con una historia dolorosa pero esencial para comprender la Grecia moderna y la presencia de comunidades pónticas en el país.