Catedral de Saint-Gilles

¡Estás frente a la majestuosa catedral de Saint-Gilles! Bueno, no es realmente una catedral, ya que oficialmente ya no tiene el estatus de catedral, pero todos la siguen llamando así.

De hecho, hoy en día está dedicada al culto protestante, desde la Reforma en el siglo XVI que marcó Escocia y Europa en general. En el interior se encuentra la escultura del famoso John Knox, uno de los grandes actores escoceses de la Reforma, que difundió junto a Juan Calvino y Martín Lutero una nueva visión de la religión cristiana que tiende a volver a la primera forma del cristianismo.

Es este movimiento religioso el que ha dado origen a las Iglesias protestantes y tienes ante ti un muy buen ejemplo de ello. Aunque no es muy grande, destaca especialmente por su impresionante aguja en forma de corona, que domina el resto del edificio, y sus llamativas vidrieras de colores que datan del siglo XX y cuentan la historia de la Biblia.

El primer edificio religioso construido en este emplazamiento data del siglo IX, pero la catedral que tienes ante ti fue construida durante el siglo XV en estilo gótico. Por lo tanto, fue construida antes de la Reforma y remodelada después del movimiento protestante.

Las diferentes capillas de la iglesia se han ido añadiendo a lo largo del tiempo y la torre linterna se añadió en 1490. Conocida por albergar magníficos conciertos en su interior, esta iglesia forma parte de la historia de Edimburgo y es sin duda uno de los monumentos que no te puedes perder en la capital escocesa.