El arenque, pescado de excelencia de Dieppe

En Dieppe hay un eslogan que proclama alto y claro « pez dieppois, pez de elección». ¿Un poco patriótico, te preguntarás? En sí mismo, no más que cualquier otra creencia defendida por un francés o una francesa orgullosos de la región o ciudad a la que pertenecen. Si hay un pescado por el que la ciudad normanda puede presumir de destacar, cuando se trata de pescarlo y cocinarlo, es el arenque. Y qué mejor manera de contarte los orígenes de esta relación especial entre Dieppe y el primo de la sardina que detenernos en el barrio de Pollet, antiguo barrio de pescadores. El arenque, que ahora se pesca sobre todo en otoño o durante las grandes fiestas que lo honran, ha sido durante mucho tiempo la providencia de los habitantes de Dieppe. En la Edad Media, era el único pescado que se recolectaba en cantidades suficientes tanto para pasar los largos meses de invierno como para sostener la economía de la ciudad, especialmente castigada en épocas de hambruna. Hacia 1300, los arenques de Dieppe se vendían incluso en los puestos de los mercados de París y Ruán mediante un servicio regular de carruajes, también conocido como «caza mareas». Pasaron los siglos y el interés por la pesca del arenque no disminuyó. Se dice que en el siglo XIX, más de 200 barcos se dedicaban a esta actividad, yendo al norte en verano para abastecerse, y pasando después por los acantilados de Normandía cuando empezaba la temporada de invierno. Cuando se vendían, los arenques adquirían nombres extraños, relacionados sobre todo con la forma en que se preparaban. Había arenques “polvorientos” , rebozados en harina y sal; arenques ” a la plancha », probablemente fileteados; arenques a la trufa, que sólo se pescaban entre Navidad y Pascua; y arenques blancos, salados y de la mejor calidad, que se regalaban a personas importantes. El arenque, antiguamente el rey de los pescados, siempre el rey de los pescados, es desde hace más de 50 años la estrella de una feria que se celebra en Dieppe cada tercer fin de semana de noviembre. Durante dos días, los productos y oficios del mar se exhiben en un rico programa que se desarrolla a lo largo del Muelle Henri IV. A la plancha, marinado, fresco y acompañado, como debe ser, de una patata asada con un poco de mantequilla salada derretida, el arenque es el plato fuerte gastronómico del evento. Seguido de cerca por la vieira, otro producto estrella del destino. En definitiva, ¡es un gran momento para estar en Dieppe en esta época del año!