Puerta de los Jacobinos

Aquí te hallas en la plaza del General de Gaulle. Nos encontramos frente a lo que fue uno de los edificios más importantes de la ciudad: la Puerta de los Jacobinos. Situada a tu derecha, marca el acceso a la ciudad baja de Carcasona. En la Edad Media, la ciudad baja también llamada bastida de San Luis, estaba rodeada por una muralla destinada a protegerla de los ataques. Para entrar, disponía de cuatro puertas a cada lado, construidas en el siglo XIV: la puerta de Toulouse, la puerta de los Cordeleros, la puerta de los Carmelitas y la puerta de San Luis. Esta última es la que solía estar aquí. Fue sustituida en 1779 por la puerta que hoy tienes ante tus ojos, porque su estilo medieval había pasado de moda: se querían construir puertas monumentales más elegantes. Fue entonces cuando se destruyeron las cuatro puertas y sólo se reconstruyó la puerta de los Jacobinos.Así pues, hoy en día, es el único vestigio de lo que constituían las murallas de la ciudad en aquella época, y permite a los visitantes entrar en pleno centro de Carcasona. Nosotros no vamos a atravesarla por el momento, puesto que vamos a ver primero la catedral, antes de adentrarnos por las callejuelas de la llamada bastida. Vamos allá.