Antigua Fábrica Real de telas

A tu derecha, en la entrada del Puente Viejo, encontrarás la antigua fábrica real de tejidos. Restaurada en 2013, este edificio es un bello testimonio de una gran parte de la historia de Carcasona. Durante muchos siglos, la actividad económica de la ciudad se centró en el comercio de telas, ¡y así ha sido desde el siglo XII! En el siglo XIV, Carcasona era el primer centro textil del reino, utilizaba la lana como materia prima y exportaba sus productos hasta Constantinopla y Alejandría. Pero fue en el siglo XVIII, 6 siglos más tarde, cuando Carcasona alcanzó su máximo esplendor en este ámbito, gracias a la construcción de fábricas como las que tienes delante. En aquella época, las fábricas eran un lugar donde los productos se elaboraban a mano. Era una forma de reunir en un mismo lugar, todas las labores necesarias para la fabricación de telas. Esta fábrica se construyó en 1694, y fue ascendida al rango de fábrica del reino dos años después de su construcción, lo que le otorgó una serie de privilegios que le permitieron impulsar la producción. Las fábricas reales gozaban del apoyo del Estado, que les concedía ayudas financieras y medidas para facilitar su desarrollo. Gracias a ello, Carcasona se convirtió en una de las ciudades productoras de telas más importantes de Europa. Fue precisamente bajo el estímulo de Colbert, ministro de Luis XIV, cuando se crearon una docena de fábricas reales en la región del Languedoc, para competir con Inglaterra y Holanda, que habían ganado terreno en el mercado con el Imperio Otomano, el mayor cliente de la época. Las fábricas fueron un éxito, y la región gozó de una auténtica época dorada durante el siglo siguiente. Pero con la Revolución Industrial, la feroz competencia de los ingleses y el auge de la viticultura, fue perdiendo su estatus. Carcasona pasó a ser conocida por sus vinos y  su patrimonio cultural, que empezaba a ser admirado y valorizado en el siglo XIX. Pero a pesar de haberse convertido en el centro administrativo de la ciudad, la antigua fábrica real sigue siendo un símbolo de esta época.