La Plaza de Grands Hommes

Esta plaza circular toma su nombre de las calles que conducen a ella. Aquí te encuentras rodeado de grandes hombres que honran los espíritus libres y las utopías. Te habrás dado cuenta de que has llegado por la calle Montesquieu. Al igual que esta calle podrás encontrar también la calles Voltaire, Diderot, Buffon, Rousseau y Montaigne. Hasta 1960, este lugar era un majestuoso mercado al que los bordeleses acudían para abastecerse de productos frescos. Reformado durante un gigantesco proyecto e inaugurado por la reina de Inglaterra en persona, es hoy un atractivo complejo comercial en pleno corazón del Triángulo de Oro. Al ascender por la calle es posible que también te hayas fijado en la fachada del famoso restaurante “Le Chapon Fin”, es el primero en recibir tres estrellas Michelín en la historia de la guía. Fundado en 1825 como restaurante y tienda de vinos, su proximidad al Gran Teatro lo convirtió rápidamente en un lugar muy frecuentado. Sin embargo, fue a principios del siglo XX cuando el restaurante tomó un nuevo rumbo con la llegada del chef catalán Joseph Sicart. Fue él quien renovó el establecimiento con su impresionante cueva artificial en el interior y creó una cocina espectacular que atrajo a numerosos comensales. Entre sus clientes más fieles estaba el rey Alfonso XIII de España, pero no fue la única persona de la realeza que acudió al restaurante. Manuel II de Portugal, el sultán de Marruecos, la reina de Madagascar y el príncipe de Gales también llegaron a apreciar el talento del chef, al igual que muchos artistas, entre ellos Sarah Bernard, considerada la mayor actriz francesa del siglo XIX, el pintor Toulouse Lautrec y políticos como George Clémenceau y Aristide Briand. Este icónico restaurante de la gastronomía francesa ha visto pasar por sus puertas a numerosas personalidades. A continuación te dejo visitar el mercado cubierto antes de continuar el itinerario desde la calle Diderot.