Rue au Beurre – Calle de la Mantequilla

Esta pequeña plaza que se forma al comienzo de la rue au Beurre o calle de la mantequilla bien merece una visita. En primer lugar, tienes la Bolsa de Bruselas, por la que acabas de pasar, en su bello edificio neoclásico. A tu izquierda, la iglesia de San Nicolás, cuyas joyerías circundantes eran antes casas que acogían a los vagabundos que buscaban la protección de esta capilla del siglo XIII. También en el centro se encuentra una de las numerosas fuentes personificadas de Bruselas. Todas ellas se han colocado en los lugares de antiguos abrevaderos puestos a disposición de la población en el siglo XIX. La ciudad encargó 12 fuentes en la década de 1980, todas inspiradas en las obras del pintor belga Pieter Brueghel. Esta ilustra el cuadro “La parábola de los ciegos”, y por supuesto, también se puede ver a la bella lechera vestida a la usanza de la época de Luis XIV. La escultura data de 1687, y se colocó simbólicamente en la calle, para recordar el mercado de la leche que se celebraba detrás de la Bolsa en la Edad Media.