El puente de San Bonifacio

No es grande, no es imponente, pero su presencia es de lo más tranquilizadora. Este lugar, lejos de ser desmesurado, es sin embargo una visita obligada de la ciudad, cuyo principal atractivo no es otro que el encantador pequeño puente de piedra que cruza el canal. El puente de San Bonifacio es uno de los puentes más jóvenes de la ciudad, ya que data de principios del siglo XX y se eleva a 2 metros sobre el agua. Y si alguna vez te preguntas si hay barcos que pasen por debajo de este puente, la respuesta es un gran SÍ. Es muy posible, los navegantes solo tienen que usar su habilidad y precisión para pasar bien en medio del puente. Este arco discreto, de forma puntiaguda, hecho de piedra y ladrillo, resume perfectamente la atmósfera misteriosa y romántica de Brujas. Desde la cima del puente San Bonifacio, ciertamente no muy grande, créenos, las diferentes vistas para fotografiar no dejarán de disputarse tu atención. Podrás ver la vista del canal, así como los edificios circundantes. ¡Un lugar mágico a cualquier hora del día, que requiere ser visto para creerlo!