La antigua central hidroeléctrica de Bergerac

Detrás de la verja, puedes ver los restos de la antigua central hidroeléctrica de Bergerac. Notas que el espacio despejado al lado de la calle está bien conservado y resaltado. Esto se debe a que el yacimiento fue descubierto en 2007, durante las obras de urbanización de la calle des Fontaines. Las excavaciones revelaron los restos de un molino de la Edad Media, una bella fachada de una vivienda renacentista y turbinas de hierro fundido, identificadas como el motor de la antigua central hidroeléctrica inaugurada en 1892. En aquella época, la ciudad estaba atravesada por un canal en el que se instalaron 5 molinos, como puedes ver en los paneles explicativos. El molino de 5 canales, en pleno centro de Bergerac, fue comprado por una empresa que lo transformó en central hidroeléctrica, ¡utilizando la fuerza del agua para hacer girar las turbinas y generar electricidad para abastecer a todo Bergerac! Era una tecnología innovadora para su época, y la central fue una auténtica pionera en el suroeste de Francia, que acababa de descubrir los milagros del hada de la electricidad. Permitió a la ciudad desarrollarse gracias a una fuente de energía fiable y más respetuosa con el medio ambiente. Ahora ya conoces mejor lo que estos restos representan para el patrimonio industrial de Bergerac. Si quieres saber más, no dudes en escanear el código QR instalado por la ciudad. Por último, ya que estás en la calle des Fontaines, hay una leyenda que dice que en 1565, cuando Catalina de Médicis y su hijo Carlos IX, que se convirtió en rey con solo diez años, pasaron por la ciudad y de las fuentes manó vino en su honor. Desgraciadamente, lo único que encontrarás hoy aquí es agua, así que no hace falta que lo compruebes. Con esto, continuemos nuestro recorrido.