Escalera Romieu

Antes de concentrarnos en la escalera que tienes delante, date la vuelta y disfruta del paisaje. Desde aquí tienes otra vista del Puerto Viejo, con los campanarios de la iglesia de San Juan Bautista que se extienden tras los mástiles de los numerosos barcos. Los campanarios son más recientes que la iglesia: el de la izquierda fue añadido en 1810, diseñado por el arquitecto suizo Tomaso Quadri, y el de la derecha fue diseñado por Paul-Augustin Viale e instalado en 1864. No hay nada más agradable que pasear por los muelles del Puerto Viejo, ¿verdad? Pero volvamos a nuestra escalera. La escalera Romieu, que sube directamente a la Ciudadela, se construyó entre 1871 y 1873 con el simple objetivo de unir el Puerto Viejo con la parte alta de la ciudad. Debemos esta monumental escalera a Paul-Augustin Viale. Sí, ¡otra vez él! Este arquitecto de Bastia también diseñó el pavimento de la Procatedral de Santa María de Bastia y, como ya he dicho, uno de los campanarios de la iglesia San Juan Bautista. En cuanto a la escalera, originalmente se llamaba escalera Rinesi, porque una familia adinerada de ese nombre había construido una casa al lado, la de la derecha, de un bonito color rojo. Cuando una de las hijas de los Rinesi se casó con un tal Sr. Romieu, que fabricaba las barandillas de la escalera, esta cambió su nombre por el de este maestro cuchillero. Compuesta por una fuente, una estatua un poco más arriba y hermosos jarrones a lo largo de todo el recorrido, que la hacen única, tenía que ser monumental, ya que era una de las primeras cosas que veían los viajeros del continente. Mostraba todo el poder y la riqueza de la ciudad. También está catalogado como Monumento Histórico. ¡Continúa por la orilla del agua, iremos a ver lo que hay arriba un poco más tarde!