Antigua muralla

Seguimos en la calle Joseph Vernet, pero ahora vamos a girar a la izquierda para ver un lugar mucho más antiguo que las mansiones de la ciudad. En la esquina de la calle Saint-Charles, verás un singular muro de piedra que sobresale del resto de la calle. Se trata de los restos de las antiguas murallas medievales que rodeaban la ciudad y que se remontan al siglo XII. La calle se encuentra en el lugar donde antiguamente se encontraba el adarve, el espacio situado entre la primera y la segunda fortificación de una ciudad. Aviñón, como muchas otras ciudades de la Edad Media, estaba doblemente protegida, rodeada por dos murallas. La zona en la que te encuentras ahora era conocida como la calle de los antiguos adarves. En su día estaba totalmente pavimentada. Entre los siglos XVII y XVIII, las murallas se derribaron progresivamente para permitir la expansión de la ciudad y acoger a una población cada vez más numerosa. Fue en esa época cuando surgió la calle Joseph Vernet y se construyeron todas las casas adosadas que la componen. Afortunadamente, se ha conseguido conservar este pequeño trozo de muralla, lo que ha permitido localizar con exactitud el lugar donde se encontraban las antiguas fortificaciones. Sigue avanzando y te toparás con el Museo Calvet.