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¡Rumbo a Borgoña! Como una encantadora ciudad medieval y la capital cultural de Borgoña-Franco Condado, Auxerre te impresionará por su rico patrimonio histórico y su ambiente acogedor. En pleno corazón de los viñedos de la región de Auxerre, sigue los pasos del famoso Cadete Roussel y disfruta de hermosos paseos por el canal, las calles empedradas del centro histórico y viñedos famosos en toda Francia. En particular los de Chablis, a sólo unos kilómetros. Entre la Edad Media y el Renacimiento, Auxerre cuenta con más de 500 casas con entramado de madera en su centro urbano y monumentos con fachadas notables que dicen mucho de su agitada historia. No esperes más y ven a descubrir el Yonne.
Aquí te encuentras en los muelles de la ciudad, que bordea el Yonne, el río que dio nombre a este departamento de Borgoña. Nace en el Morvan, en Mont Préneley, y desemboca en el Sena cerca de la ciudad de Montereau-Fault-Yonne. Leer más
Ahora nos encontramos en el barrio de la Marina, que fue una de las partes más importantes de la ciudad y ahora una de las más visitadas. Leer más
La calle de la Marina, corazón del barrio del mismo nombre, es testigo de la larga historia de Auxerre. A tu izquierda, verás murallas que datan del siglo III, construidas por los romanos. Leer más
Plaza encantadora y agradable, sin duda una de las más pintorescas de Auxerre, la plaza de San Nicolás marca el límite entre los muelles del Yonne y el casco antiguo de Auxerre. Leer más
Esta torre, construida en el siglo XII, se añadió en aquella época a la abadía de San Germán para sustituir a la antigua torre construida un siglo antes. Sin embargo, la abadía se reconstruyó un poco más tarde. Leer más
Justo detrás de la torre hay un edificio histórico. No dudes en acercarte para admirarlo mejor. Esta abadía es uno de los monumentos imprescindibles de Auxerre Leer más
Te encuentras frente a una de las torres que eran parte del recinto fortificado que rodeaba la abadía de San Germán. Estas murallas medievales se construyeron en el siglo XII Leer más
Aquí estás frente a la catedral de Saint-Étienne, que con sus 68 metros es el edificio más alto de la ciudad. Al final de su construcción, también se consideraba uno de los edificios góticos más bellos de Francia. Leer más
Date la vuelta y admira la fachada que hay frente a ti. Pertenece a la capilla del Seminario. Por desgracia, está cerrada a los visitantes, pero su exterior es un buen ejemplo de la arquitectura del siglo XVIII de la ciudad. Se construyó en 1706 gracias al obispo de la ciudad, André Colbert. Leer más
Aquí tienes una magnífica vista general de parte de la catedral, y en particular de su imponente torre. Se eleva 68 metros sobre los tejados de Auxerre y es el rasgo más distintivo de la catedral: consta de una sola torre, lo que es bastante raro, ya que las catedrales suelen tener dos. Leer más
Esta plaza del centro de la ciudad es una de las más representativas, ya que en ella se encuentra uno de los símbolos de Auxerre, nada menos que un personaje muy conocido : el Cadete Roussel. Leer más
La iglesia se construyó sobre los cimientos de un monasterio del siglo VII, y tardó más de 400 años en terminarse. Restaurada varias veces a lo largo de su existencia, en la actualidad presenta una serie de estilos arquitectónicos que la hacen llamativa. Leer más
Te invito a que mires hacia arriba y admires la hermosa Torre del Reloj. Esta torre, que antes fue una prisión Leer más
Auxerre es una ciudad medieval que aún conserva muchas huellas de su historia, sobre todo las casas con entramado de madera que decoran sus calles empedradas. En la época medieval, estas casas se construían enteramente con madera del bosque de Morvan, un material fácil de encontrar y manejar. Leer más
A tu derecha está la plaza de los Cordeliers, una de las más grandes de la ciudad. Hoy tiene un gran aparcamiento en su centro, pero ya en el siglo XIII había aquí un convento, el de los Cordeliers. Este es el nombre dado a una orden de monjes que llevaban una cuerda como cinturón y que establecieron conventos por toda Francia. Leer más
Fíjate en el edificio de la derecha, con su puerta azul. Es la casa donde vivió Marie Noël. Nacida en Auxerre, Marie Rouget pasó su vida en esta ciudad de Borgoña, donde escribió sus obras con pasión y dedicación. Pese a ser una de las más grandes poetas y escritoras de su siglo Leer más
Como elemento clave del patrimonio de Auxerre, la iglesia de San Pedro combina de manera fascinante la arquitectura gótica con el estilo renacentista. Su fachada y torre fueron restauradas en los siglos XVI y XVII, reflejando esta mezcla de estilos. Leer más
Desde el puente Paul Bert, ¡tendrás una vista emblemática de Auxerre! Los monumentos de la ciudad adornan las orillas del Yonne y sus barcos amarrados a lo largo de los muelles. A tu izquierda está la impresionante catedral de Saint-Étienne, símbolo de la ciudad Leer más
Auxerre puede ser el hogar del famoso Cadete Roussel, pero también lo es de muchas personalidades menos conocidas pero igualmente interesantes. La primera es Colette, la gran escritora francesa del siglo XX detrás de las novelas Claudine Leer más
Aquí estás delante del teatro de Auxerre, centro cultural de la ciudad. Comenzó a construirse en 1938 en el solar de una antigua bolsa de trabajo. En un principio estaba destinado a ser una Casa del Pueblo, un lugar de reunión para los residentes de clase trabajadora. Leer más
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Explora los prestigiosos viñedos Grand Cru de Chablis y descubre sus sabores únicos.
Para completar tu visita a Auxerre, te recomiendo explorar sus diversos museos, que le han dado el sobrenombre de capital cultural de Borgoña. Entre ellos, el Museo San Germán, junto a la abadía del mismo nombre, que forma parte del patrimonio histórico de la ciudad; el Museo de Historia Natural, que revela la biodiversidad pasada y presente de la región; y el Museo Leblanc-Duvernoy, ubicado en una casa urbana del siglo XVIII. Este ultimo posee una valiosa colección de tapices y una excelente colección de cerámicas que han desempeñado un papel importante en el desarrollo de este arte en Francia.
Para degustar las especialidades culinarias de la ciudad y de la región, acércate a los distintos mercados de Auxerre, que se instalan los miércoles por la mañana en la plaza de la Arquebuse, en la plaza del Ayuntamiento y en todo el centro de la ciudad. Es tu oportunidad de descubrir las trufas de Borgoña, los caracoles de Borgoña, la andouillette de Chablis y las gougères. Además, delicias dulces como el flamusse de manzana, la galleta Duché y el tartouillat.
Auxerre también es famosa por sus numerosos viñedos, con una gran variedad de denominaciones diferentes. Chardonnay, Pinot Noir, Aligoté y Crémant de Borgoña ocupan un lugar destacado en la región. Si tienes carro, puedes visitar Chablis y sus viñedos, uno de los más antiguos de Francia, que están a sólo 25 minutos en carro del centro de Auxerre.
Lejos de la ciudad, hay varios yacimientos en la región que bien merecen una visita. Este te transportará a la época de los galo-romanos, para descubrir una antigua ciudad que se alzaba sobre la calzada romana de Agripa. Una de las más importantes de su tiempo. El yacimiento está abierto a los visitantes de abril a octubre, con visitas autoguiadas o guias disponibles por unos pocos euros.
Al otro lado de Auxerre, a unos veinte kilómetros del centro, se encuentra la Abadía de Pontigny, la mayor iglesia abacial de estilo cisterciense que se conserva en el mundo. Diseñada en el siglo XII, está extraordinariamente bien conservada y posee una magnífica arquitectura románica y gótica. Está abierta a los visitantes, así que consulta los horarios en la página web.
Si quieres seguir explorando el patrimonio de la región, puedes hacer una excursión a Joigny, una Ciudad de Arte e Historia y un lugar maravilloso para descubrir a orillas del Yonne. Descubrirás sus casas con estructura de madera y los numerosos artesanos y creadores que se instalan en sus calles.
A continuación, dirígete a Noyers-sur-Serein, uno de los pueblos más bonitos de Francia. Es una delicia pasear por esta antigua ciudad medieval, con sus calles adoquinadas bordeadas de casas con entramado de madera, sus murallas históricas y los restos de su castillo medieval.
No muy lejos de Noyers-sur-Serein, encontrarás el castillo de Ancy-le-Franc, un auténtico palacio renacentista que alberga la mayor colección de pinturas murales de la época. Verdadera obra maestra arquitectónica, te invita a retroceder en el tiempo en sus salas de época y sus excepcionales jardines. La entrada es de pago, y puedes elegir una visita autoguiada o guiada.
Siempre en la misma zona, aprovecha para visitar el Castillo de Tanlay, una hermosa residencia que también data del Renacimiento y que fue un importante lugar de reunión de los hugonotes. Puedes hacer una visita guiada al castillo (previa reserva). Está cerrado durante la temporada de invierno.
Si te diriges al otro lado de Auxerre, no querrás perderte el Castillo de Guédelon, una auténtica inmersión en el corazón de la Edad Media. Este castillo fortificado lleva más de 25 años en construcción, utilizando métodos y herramientas del siglo XIII. Observa a los numerosos artesanos trabajando y aprende las técnicas de construcción que se utilizaban en el pasado.
Todavía a menos de una hora en carro de Auxerre, a las puertas del Parque Regional de Morvan, puedes pasear por Vézelay, un soberbio pueblo medieval catalogado como uno de los Pueblos Más Bonitos de Francia. Con su excepcional situación geográfica y su basílica declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Vézelay es uno de los lugares más emblemáticos del Camino de Santiago y atrae a miles de peregrinos cada año desde hace siglos.
Saborea las deliciosas combinaciones de vinos, productos locales y dulces en Chablis.
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