Puente de los Amores

Llegamos al Puente de los Amores. Otro lugar simbólico de la ciudad. El puente ofrece una vista impresionante sobre el lago y la Isla artificial de los Cisnes. Su romántico nombre tiene en realidad un doble significado. Es un lugar de encuentro para los enamorados, por supuesto, pero en el pasado también fue un lugar muy conocido para la prostitución. Hoy no es así, pero eso es lo que significaba ir al Pont des Amours en el siglo pasado. El Pont des Amours ha sido elegido como fondo de pantalla de Windows 7, lo que ha llevado a ese paisaje a la cima del éxito social. ¡Es para estar orgulloso! En cualquier caso, ten cuidado de a quién besas aquí: la leyenda dice que un beso intercambiado en este puente une a los amantes para la eternidad. Aprovecho la ocasión para contarte otra historia de amor, la de la trágica leyenda de la Dama del Lago, extraída directamente de las creencias folcloricas de Annecy. Hace mucho tiempo, la bella Bertolina vivía en el castillo de Angon, a orillas del lago. Se enamoró de un caballero que regresaba de las Cruzadas, se casó con él y vivieron felices para siempre. Una noche, Bertolina quedó deslumbrada por el resplandor de una estrella. Fascinada por su brillo, pidió a su marido que se la trajera. Él no lo dudó ni un segundo y emprendió un largo viaje a través del mundo para cumplir el deseo de su amada. Al centésimo día, cuando llegó a la orilla del mar, vio por fin la estrella tan buscada reflejada en el agua. Entonces apareció allí una sirena y se la entregó, diciéndole que si esta medianoche no estaba de vuelta con Bertholina, ella pagaría con la vida su insensato capricho. El caballero partió a todo galope, en dirección a Annecy. Desgraciadamente, en su excitación, se equivocó de camino y acabó en la orilla opuesta. Divisó a un pescador y le pidió que le ayudara a cruzar el lago lo más rápido posible. Pero el pescador no era otro que el mismísimo Diablo, perfectamente consciente de que aquel caballero desesperado sería una presa ideal. Prometió llevarlo al castillo de Angon a tiempo para salvar la vida de Bertolina, a cambio de su alma, que vendría a recoger dentro de 10 años. Naturalmente, el caballero aceptó. Llegó justo a tiempo al castillo, ofreció la estrella a su amada y todo fue bien durante los 10 años siguientes. Cuando llegó el fatídico día, la angustiada bella corrió hacia el Diablo y le suplicó que le devolviera a su marido. Fue entonces cuando tomó forma un nuevo pacto. Si la joven era capaz de reconocer a su marido entre las personas que encontraría durante los próximos días, se lo devolvería. Bertolina escrutó los rostros de todas las personas con las que se cruzó, pero nada funcionó. Un mes después el Diablo le hizo una visita, diciéndole que le habían presentado a su marido varias veces y que no lo había reconocido. Loca de rabia y angustia, se arrojó desde la cima de la montaña del Roc de Chère. Ten cuidado si te bañas en el lago, pues cuenta la leyenda que atrae a los bañistas a las profundidades en busca de su amor perdido. Ésta es la razón por la que nunca se encuentra a los ahogados en el Roc de Chère.