Mercado Central

Te encuentras ante una auténtica institución alicantina, su mercado central. Ninguna visita a una ciudad está completa sin una visita a su cueva gastronómica, sus mercados. Y esto es especialmente cierto en España, donde las tapas llaman la atención en cada esquina. Por el aspecto del edificio, ya sabes que vamos a ponernos manos a la obra. Este magnífico edificio, de estilo ecléctico con ornamentación modernista valenciana, fue diseñado en la década de 1920 por los arquitectos Juan Vidal Ramos y Enrique Sánchez Sedeño. Su singularidad radica en que se construyó sobre la antigua muralla que protegía la ciudad en el siglo XVIII, y en que una de sus plantas es subterránea, debido a la pendiente de las calles vecinas. El 25 de mayo de 1938, durante la Segunda Guerra Mundial y la guerra civil española, Alicante, que había permanecido del lado de los republicanos, fue bombardeada por aviones fascistas desde Mallorca. El mercado resultó gravemente afectado, con más de 300 muertos y miles de heridos. Afortunadamente, estos conflictos han quedado atrás y solo te queda disfrutar al máximo de tu degustación. Aquí los productos son frescos y de la mejor calidad. Carne, jamón y pescado, queso o fruta y verdura, aquí es donde los lugareños vienen a abastecerse desde hace un siglo, ¡así que date un capricho y déjate tentar!