Reloj Charvet

Ante ustedes, elegantemente ubicado en pleno corazón del Viejo Lyon, se erige el reloj Charvet. Acérquense y observen atentamente: es un reloj muy particular, ya que consta de 5 campanas, rodeadas de 4 autómatas que representan a los famosos personajes de Arlequín, Polichinela, Guignol y Gnafron. Es por eso que se le apoda “el reloj de los Guignols”, en un guiño a Laurent Mourguet, el titiritero francés que utilizaba las marionetas de Arlequín y Polichinela para realizar espectáculos, y que creó las de Guignol y Gnafron. Con sus 7 metros de altura, ofrece un breve espectáculo cada 15 minutos, animando a los personajes durante unos segundos, excepto por la noche. Fue instalado aquí en enero de 2021, pero en realidad, el reloj es mucho más antiguo que eso. Anteriormente se encontraba en el 2º distrito de Lyon, en la Presqu’île, desde 1884. Recientemente fue renovado para devolverle su esplendor de antaño y se instaló aquí, frente a los museos Gadagne, dedicados precisamente a las artes de la marioneta y a la historia de Lyon. La Maison Charvet, fundada en 1852, fue la encargada de construirlo. Es una casa de renombre aquí: diseñó muchos de los relojes públicos de la ciudad. Es importante saber también que Lyon, entre los siglos XVI y XVII, ocupaba un lugar destacado en el ámbito de la relojería, antes de que los grandes relojeros se trasladaran a Suiza. Se necesitaron 18 meses de trabajo para crear este magnífico reloj, que ha estado dando la hora de manera divertida y simbólica a los habitantes durante casi 150 años. Bueno, los dejo disfrutar del espectáculo, e incluso podrán, si tienen tiempo, dar un paseo por los museos Gadagne, que albergan, por un lado, más de 2000 marionetas de todo el mundo, y por otro, más de 80,000 objetos que permiten rastrear la historia de la ciudad.