Las 6 mejores cosas que hacer en Dunkerque

¿Viaja hacia el Norte y busca una ciudad donde disfrutar de una estancia agradable, donde historia y cultura vayan de la mano? No lo dude más. Ya sabe que puede confiar en Navaway, su fiel compañero de viaje. Hemos analizado detenidamente todas las ciudades del norte de Francia y hemos llegado a la siguiente conclusión: Dunkerque es una excelente elección. Claro que está lejos de las calles chic de Los Ángeles o del sol cenital de las islas tropicales, pero esta ciudad con un rico pasado tiene tanto encanto como esos lugares. Deje volar su curiosidad y descubra las seis razones principales por las que debería visitar Dunkerque.

Qué hacer en Dunkerque

1. Visitar los escenarios de la Batalla de Dunkerque y la Operación Dinamo.

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Categoría: €€/Cultural

Descripción: Si hay algún aficionado a la historia entre nuestros lectores, debería saber exactamente de qué estamos hablando con sólo leer el título. La batalla de Dunkerque estalló durante los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial. La evacuación de la ciudad, más conocida como “Operación Dinamo”, tuvo lugar entre el 26 de mayo de 1940 y la madrugada del 3 de junio. Siempre es importante dejar constancia de los acontecimientos pasados, como recordatorio para honrar la memoria de las víctimas. La visita dura unas 2 horas, y descubrirá cómo Dunkerque, ciudad mártir tras los bombardeos, se convirtió en un símbolo de esperanza a los ojos del mundo entero.

2. Campanario de Saint-Eloi

beffroi

Categoría: €/Cultural

Descripción: Se tarda menos de una hora en visitar el Campanario de Saint-Eloi. Es el lugar perfecto para disfrutar de una vista panorámica de 360°. A muchos visitantes les gusta terminar su estancia con esta actividad, tan cautivadora es. ¿No dicen que lo mejor viene al final? El campanario de Saint-Eloi, de 58 metros de altura, es Patrimonio Mundial de la UNESCO. Aquí podrá admirar todo lo que ofrece Dunkerque, y más aún si incluye sus alrededores: la playa hasta donde alcanza la vista, la bulliciosa ciudad y el puerto y sus barcos. También tendrá acceso al carillón y a la terraza panorámica con sus 65 escalones (¡no olvide una botella de agua!). En la cima, empápate de la historia de este monumento único, histórico y emblemático, que los lugareños consideran parte del ADN de la ciudad de Dunkerque.

3. Museo Marítimo y Portuario de Dunkerque

musee portuaire

Categoría: €Cultural

Descripción: Cada ciudad tiene su museo original, y para la ciudad de Dunkerque, el lugar en cuestión sería sin duda el Museo Marítimo y Portuario. En el programa, pasará por varias salas, cada una tan importante e interesante como la siguiente: en total, hay 1600 m² de exposiciones en el programa, que abarcan 4 siglos de historia y viajes. Sí, retrocederá en el tiempo hasta los inicios de la historia de Dunkerque. Le intrigarán las cerca de 500 obras de arte que ocupan orgullosamente su lugar en las paredes y mesas del museo: maquetas, vídeos, pinturas… Pero no olvide, queridos amigos, que no debe dejar de pasar por delante de los tres barcos y el faro, ambos un punto culminante de su visita si quiere saber más sobre Dunkerque. Deberías dedicar al menos entre 2 horas y 30 minutos y 3 horas a ver las obras en su totalidad, para no perderte nada.

4. La playa de Malo-les-Bains

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Categoría: €/Deporte/Gastronomía

Descripción: Arriba hemos hablado de la playa de Dunkerque. De vez en cuando, conviene hacer una pausa en la visita de la ciudad y dejar de lado toda la cultura y el patrimonio para darse un chapuzón en las tranquilas aguas que le abren los brazos. La playa de Saint-Malo-les-Bains es una auténtica delicia (siempre que se vaya en verano para disfrutar de mejores temperaturas) para los que quieran pasear por la playa mientras escuchan su mejor lista de reproducción musical; o los que quieran entregarse a una actividad deportiva como un partido de tenis o windsurf. Muchos turistas afirman incluso que este lugar merece ser llamado “la mejor playa del Norte”. Después del baño, puede visitar uno de los pequeños restaurantes de la zona para degustar una especialidad local.

5. Acuario de Dunkerque

aquarium

Categoría: €/Cultural

Descripción: Sigamos con el tema del agua, ¿vale? Situado a sólo 500 metros de la playa, el Acuario de Dunkerque le introducirá en el mundo marino en profundidad. Conocerá varias especies acuáticas de agua dulce y otras procedentes de todos los océanos del mundo. Aprenderá más sobre la historia de estos mamíferos y se dará cuenta rápidamente de que el océano es sin duda el lugar del mundo (después del espacio) donde aún nos quedan muchos secretos por descubrir. Es una actividad enriquecedora, que les encanta a los niños y disfrutarán los mayores, rodeados de corales, tortugas, caballitos de mar, diferentes tipos de algas y crustáceos de todo tipo… Y no olvides que la vegetación de las pozas es de las más bonitas que hay, ¡así que no dudes en inmortalizarlo todo con un clic de tu cámara!

6. La iglesia de Saint-Eloi

eglise

Categoría: €/Cultural

Descripción: Para terminar nuestra lista de las seis mejores cosas que hacer en Dunkerque, ¿por qué no visitar la legendaria Eglise Saint-Eloi? Es fácilmente reconocible gracias a su soberbia y majestuosa fachada que deja a los visitantes sin aliento. Es el tipo de lugar que invita a la reflexión y a la serenidad. Se sentirá como en un remanso de paz, sólo interrumpido por el sonido de sus pasos. ¿No es poético? Este monumento, precioso donde los haya, alberga la tumba de Jean Bart, corsario de Dunkerque famoso por sus hazañas en favor de Francia, además de numerosas capillas y un órgano. Esta hermosa iglesia de estilo gótico, restaurada desde los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial, es de visita obligada.

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