La catedral de Santiago

En caso de que te preguntes cuál es el monumento más antiguo de la ciudad, la respuesta está justo ante tus ojos. Los orígenes de la catedral de Santiago se remontan a alrededor del año 1300, cuando Bilbao era todavía un pueblo de pescadores. En ese momento, no había allí ningún gran edificio religioso, sino simplemente una pequeña iglesia que finalmente fue destruida por un incendio en 1374. Sin embargo, como es de imaginar, la historia no terminó ahí. Para llegar a este lugar de culto, tal y como lo vemos hoy en día, habrá que esperar la intervención del Papa francés Gregorio XI y una sucesión de trabajos repartidos a lo largo de más de un siglo. En cuanto a la arquitectura, la catedral de Santiago presenta todas las características del gótico, excepto por su torre y su fachada del siglo XIX, que son más bien de estilo neogótico. Además de ser considerado “Patrimonio Histórico y Artístico de España” desde 1931, el sitio fue declarado Honorablemente Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2015, en la categoría de Caminos de Santiago de Compostela. Ahora se entiende mejor por qué el edificio está dedicado a Santiago, el santo patrón de Bilbao. Pero también por qué hay conchas del Peregrino, símbolo universal del Camino de Santiago, sobre la puerta de entrada de la catedral.