Teatro municipal de los Lices

Más clásico, pero no por ello menos interesante que el Gran teatro de los Cordeliers, el Teatro municipal de los Lices es uno de los emblemas culturales más fuertes de la ciudad. Su innegable elegancia lleva el sello de los incansables esfuerzos que llevaron a su creación en este sitio hace dos siglos. ¡Vamos a retroceder un poco! El 7 de septiembre de 1861, Paul Bermond, abogado y alcalde de Albi, recibió una petición firmada por 408 “personalidades” especialmente enfadadas. Juntos exigían una cosa: la creación de un teatro en la ciudad. El mensaje llegó, pero nada ocurrió durante más de 20 largos años. En 1886, algunos miembros del ayuntamiento volvieron a la carga y exigieron que se adoptara el proyecto, en caso contrario irían a la huelga. Dos años más tarde, la ubicación del pequeño jardín nacional fue elegido como sede del futuro teatro. Poco a poco, la nueva infraestructura cultural de Albi fue tomando forma hasta su inauguración en 1893. Por dentro y por fuera, todo fue cuidadosamente pensado y ejecutado por artesanos de Albi y Toulouse. Sometido a trabajos de restauración entre 2011 y 2013, el Teatro de los Lices forma parte de los monumentos históricos de Albi desde 1999. Y con él, tenemos la prueba concreta de que cuando realmente se desea algo, el secreto está en darse los medios para conseguirlo.